Por avances de la IA, el 40% de la fuerza laboral mundial tendrá que reeducarse

  • El gasto mundial en IA alcanzará los 632.000 millones de dólares en 2028
  • Los roles de nivel inicial serán los más afectados por la innovación en IA para 2025.
  • Informe afirma que empleados tienen más probabilidades de verse afectados por el impulso en IA

Con la innovación de la Inteligencia Artificial (IA) alcanzando velocidades vertiginosas y un informe, de IDC denominado “Guía mundial de gasto en IA e IA generativa”, que prevé que el gasto mundial en IA alcanzará los 632.000 millones de dólares en 2028, casi el doble de sus cifras actuales. La mas reciente investigación de IBM predice que los empleados necesitarán nuevas habilidades profesionales para seguir siendo competitivos en el entorno laboral.

El informe de 32 páginas, titulado “Trabajo aumentado para un mundo automatizado impulsado por la IA“, sostiene que los roles de nivel inicial serán los más afectados por la innovación en IA para 2025.

Según el informe, el 48% de los encuestados afirmó que los puestos de gestión experimentados y de primer nivel se verían moderadamente afectados por la IA, siendo los ejecutivos los menos afectados.

A pesar de los cambios sísmicos que se esperan en el lugar de trabajo, una muestra representativa de ejecutivos señaló que la IA generativa no reemplazará a los humanos. Sin embargo, se espera que los trabajadores adquieran nuevas habilidades, y se espera que 1.400 millones de personas en la fuerza laboral mundial se vean afectadas por la necesidad de actualizar sus habilidades.

El informe afirma que los empleados que tienen más probabilidades de verse afectados por el impulso de reciclaje profesional desencadenado por la integración de la IA son:

  • Finanzas
  • Riesgo y cumplimiento
  • Compras
  • Servicio al cliente
  • Marketing

El informe instó a los ejecutivos a buscar activamente la creación de nuevas habilidades para sus empleados, señalando que la integración de la IA puede aumentar el crecimiento de los ingresos hasta en un 15%.

“A medida que la tecnología se vuelve más fácil de usar, los empleados también pueden hacer más con habilidades técnicas menos avanzadas”, se lee en el informe. “Además, a medida que las máquinas se hacen cargo de las tareas mundanas, las personas pueden dedicar más tiempo a la resolución de problemas y al trabajo colaborativo que requiere habilidades interpersonales más sólidas”.

El informe indica “un nuevo paradigma de habilidades” debido a la mayor adopción de la IA generativa. Una vez clasificada como la habilidad más crítica en la fuerza laboral, el dominio de STEM cayó 12 lugares en menos de siete años, detrás de las habilidades de gestión del tiempo, la ética y la integridad, y la capacidad de hablar un idioma extranjero.

A medida que el mundo avanza, IBM recomienda que las empresas que buscan incorporar la IA en sus procesos deben “priorizar con propósito”, invertir en talento tanto como en tecnología y “liderar con el modelo operativo”.

La IA generativa ya ha tenido un comienzo difícil en la fuerza laboral global después de que Samsung prohibiera a sus empleados usar ChatGPT luego de una violación de seguridad relacionada con el código fuente. Otras empresas, como Apple, Amazon ) y un grupo de gigantes financieros, han impuesto barreras al uso de la IA generativa por parte de los empleados.

La pérdida de empleos es la punta del iceberg para los escépticos

Los principales críticos de la IA han advertido que la IA plantea graves riesgos para la privacidad de los usuarios y viola las normas de derechos de autor existentes. Los desarrolladores de IA OpenAI y Meta están en los tribunales por presuntas violaciones de la propiedad intelectual en el entrenamiento de sus modelos de IA generativa.

Dado que se espera que la inversión en IA supere la marca de los 200.000 millones de dólares, los legisladores de Estados Unidos han presentado un proyecto de ley para poner en marcha una Comisión Nacional de IA para proteger a los usuarios del uso indebido de la IA. El proyecto de ley bipartidista busca equilibrar las oportunidades de usar tecnología innovadora con los riesgos inherentes que plantea la economía de los EE. UU.

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