En la era digital, la atención es un bien cada vez más escaso. Según un estudio realizado por la Dra. Gloria Mark, profesora de informática en la Universidad de California, Irvine, el tiempo promedio que una persona se concentra en una sola pantalla ha disminuido drásticamente. En 2004, el tiempo promedio de enfoque era de 2.5 minutos, pero para 2021, se redujo a solo 47 segundos. Este cambio drástico nos hace reflexionar sobre cómo el consumo de medios digitales está afectando nuestra capacidad de concentración.
A pesar de esta disminución en el tiempo de atención, la Dra. Mark señala que esto no es necesariamente un reflejo de una falla personal. “Somos criaturas sociales”, comenta Mark, explicando que nuestra tendencia a responder mensajes y buscar medios para conectarnos y comunicarnos es inherente a nuestra naturaleza. Por lo tanto, en lugar de eliminar todas las formas de medios de nuestros teléfonos, es crucial mantener un equilibrio saludable.
¿Cómo podemos recuperar el control de nuestra atención?
Una de las recomendaciones de la Dra. Mark para recuperar el control sobre nuestra mente es volverse consciente de los comportamientos automáticos. Esto implica desarrollar una “meta-conciencia”, es decir, reconocer lo que estamos haciendo en el momento en que sucede. Por ejemplo, notar cuándo estamos agarrando nuestro dispositivo sin pensarlo puede ayudarnos a identificar patrones de uso impulsivo.
Además, Mark ha descubierto que las personas tienen ritmos personales de atención que fluctúan a lo largo del día. Al monitorear estos “picos y valles en la atención”, podemos aprovechar estos momentos para organizar nuestras tareas de manera más efectiva, dedicando las tareas más exigentes a los momentos de mayor concentración.
Consejos para mejorar tu atención:
- Sé consciente de tus hábitos: Observa cuándo y por qué utilizas tus dispositivos. ¿Es por necesidad o simplemente por hábito?
- Organiza tu día según tus picos de atención: Identifica los momentos en los que tu atención es más fuerte y aprovecha ese tiempo para las tareas más importantes.
- Mantén un equilibrio: No es necesario eliminar todos los medios de tu vida, pero sí encontrar un balance que te permita disfrutar de la tecnología sin que esta controle tu vida.
El impacto en niños y adolescentes
La reducción del tiempo de atención no solo afecta a los adultos, sino que también tiene un impacto significativo en niños y adolescentes, quienes están creciendo en un entorno saturado de dispositivos digitales. Estos jóvenes, que son nativos digitales, están más expuestos a estímulos constantes y cambiantes, lo que puede afectar su capacidad para mantener la atención en tareas prolongadas, como estudiar o leer un libro. A medida que el tiempo de enfoque disminuye, también lo hace su capacidad para desarrollar habilidades importantes, como la resolución de problemas y el pensamiento crítico.
Además, estudios recientes han sugerido que el uso excesivo de pantallas en los niños puede estar relacionado con problemas de comportamiento, falta de sueño y dificultades para regular sus emociones. Es crucial que los padres y educadores sean conscientes de estos desafíos y busquen maneras de fomentar un uso más equilibrado y saludable de la tecnología. Esto podría incluir establecer límites de tiempo para el uso de dispositivos, promover actividades sin pantallas, y enseñar a los jóvenes a ser conscientes de sus hábitos digitales.
Recuperar el control de nuestra atención en la era digital puede parecer un desafío, pero con conciencia y equilibrio, es posible mantenernos enfocados y productivos.