Si estas buscando desesperadamente que regalar en estas fiestas y te sobran unos milloncitos, pues este es tu Luxury Gadget, hablamos del iPhone 3GS Supreme, para el cual se tardan unos 10 meses en su elaboración, cuenta con una cubierta creada con 271 gramos de 22k de oro macizo. La orilla frontal posee 136 impecables diamantes, para un gran total de 68k. El logo en la parte trasera de oro macizo con 53 diamantes por valor de 1k cada uno, pero sorpresa el botón de navegación frontal “Home” es de un solo corte de diamante, que por demás es muy raro de 7,1k.
Pero una joya como esta no podía venir envuelta en trapos, así que el cofre que alberga este teléfono único, se hace de un solo bloque de granito, con incrustaciones en oro de Cachemira con el interior forrado con el mejor cuero de Nubuck, el peso del cofre sin el móvil es de 7 kg.
Por un precio que ronda 3.2 millones de dólares te aseguramos será tu mejor regalo por mucho tiempo.
(Nota técnica: el equipo viene desbloqueado y listo para usar con cualquier Proveedor)
Si te preguntas quienes son los fabricantes de esta Maravilla pues es La casa StuartHughe te hago una breve historia sobre ellos haciendo clic en el enlace.
Te gusto este artículo?. Puedes dejarme tu comentario.
La casa StuartHughe
Nacido en 1971 en la vibrante ciudad de Liverpool, Inglaterra, un lugar famoso en todos los aspectos de la creatividad y la innovación en las artes, música y por supuesto fútbol mi deporte favorito, Stuart Hughes, comenzó a reunir todas las historias de éxito de la ciudad para comenzar el suyo.
Junto con su esposa Katherine Hughes puso en movimiento a Goldstriker Internacional, que sería la columna vertebral para la creación de estos maravillosos proyectos nuevos y exclusivos. Los artículos tenían que ser único, con una atención muy alta al detalle, pero no solo las piezas sino también las cajas las cuales son hechas a mano para preservar toda la belleza.
Con el gusto exquisito de Stuart para el diseño y el ojo de Katherine la producción comenzó. Con la simple idea de dejar que la tecnología fuera abrazada por el lujo.